Todas las fotografías cuentan -o deberían- contar una historia. Pero también hay instantáneas, mas o menos icónicas, que esconden detrás una gran historia que no siempre es conocida.
Felix Fuentes y José María Díaz-Marotose se han encargado de recoger medio centenar de imágenes que no sólo recogen la historia fotográfica de España de los últimos 80 años, sino que indagan en las historias que se esconden tras esas imágenes, muchas de ellas muy conocidas y convertidas casi en un símbolo. El resultado es «50 fotografías con historia» que, recientemente publicado por Signo Editores, merece un lugar destacado en las listas de regalos navideños que tanto se estilan por estas fechas.
Como pequeño adelanto de todo lo que puede encontrarse entre sus páginas, hemos pedido a sus autores que seleccionen media docena de estas fotografías con historia.

Serie “La calle”, 1958-64. Joan Colom
Cuando Joan Colom, contable, decide asomarse a la calle tiene 37 años. Sólo hacía un año que había ingresado en la Agrupació Fotográfica de Catalunya, así que suponemos que aquel día de 1958 ya se traía algo entre manos. Y no una cosa sino dos: una cámara fotográfica y un método: «hacer fotografías de manera regular y continuada, semana tras semana, sin poner en peligro mi integridad física y sin perder la capacidad de atrapar las situaciones de manera viva y espontánea.»
La publicación del libro ‘Izas rabizas y colipoterras’ -con textos de Camilo José Cela- sirvió no sólo para dar fama a todas esas fotografías de las calles del Raval de Barcelona, sino que también tuvieron un grave daño colateral. Eloisa Sánchez se reconoció en una de las imágenes y denunció al autor y la editorial al considerar que podría creerse que era una prostituta en lugar de camarera de uno de los bares del barrio.
La demanda por un millón de pesetas -una fortuna en la época- no prosperó, pero sí le quitó a Colom las ganas de volver a hacer la calle con su cámara durante unas cuantas décadas.

Fidel Castro, 1958. Enrique Meneses
La de esta foto es una de esas historias fantásticas de principio a fin. Meneses llega a La Habana por una mujer pero, compuesto y sin novia, decide aprovechar para intentar algo que nadie había conseguido: entrevistar y fotografiar a los barbudos que por aquel entonces comenzaban la revolución en la sierra.
En plena dictadura de Batista, escondió sus cámaras en unas cajas de whisky, se vistió como los locales y desde Santiago emprendió el camino para encontrarse con Fidel Castro. Los retratos que le hizo fueron portada en Paris Match y dieron la vuelta al mundo, pero sacarlos de la isla tampoco fue fácil: en las enaguas de una joven. Una foto que, en realidad, no tiene una, sino muchas historias.

Paul McCartney, 1965. Joana Biarnés
La intrépida Joana no se conformó con las fotos de la rueda de prensa y se coló a través del montacargas de un hotel para llegar a la habitación donde se alojaban The Beatles en su visita a España. La foto bajando del avión la tenía. Ella y todos los demás fotógrafos así que consiguió llegar hasta la habitación y el mismo Ringo Starr le abre la puerta.
«I like take one picture, please, only, only», dijo Biarnés en su particular inglés. Y parece que convenció a las estrellas británicas de que no era otra fan loca, porque le dejaron pasar y 4 horas después la fotoperiodista tenía en sus manos un rollo forzado a 400 ASA con usan fotos únicas de los Beatles.

Dolores Ibárruri, La Pasionaria, y Rafael Alberti, 1977. Marisa Flórez
Hay fotos con historia y fotos que son historia. Esta instantánea de Marisa Flórez con La Pasionaria y Rafael Alberti en el Congreso reúnela esas dos condiciones. Hay algo de aparente sencillez en esta fotografía, cuyo mérito parece estar en el lugar y momento adecuado.
Pero hay mucho más. Tiene esta imagen un punto de inauguración solemne. El formato horizontal elegido y el gran angular permiten mostrar los rostros girados de algunos diputados y la cara de sorpresa de muchos otros.

Danza Khmer. Isabel Muñoz.
La historia que hay detrás de esta fotografía es triste e importante. La danza khmer es una tradición milenaria de Camboya. Cuando Isabel Muñoz viajó a Camboya para conocer a las pocas bailarinas que quedaban conoció a la protagonista de la fotografía, estrella del ballet nacional.
Al poco tiempo, la bailarina protagonista fue asesinada en la calle por la mujer del presidente del país. Así que la foto no solo representa la muerte de una tradición -pues apenas quedan bailarinas de Khmer- sino también es una mano señalando la impunidad que existe ante este crimen.
Autorretrato con cuerpo herido, 1981. Alberto García-Alix
Las fotografías de García-Alix hablan de esas cosas que hay que estar viviéndolas en primera persona y en la propia carne para poder contarlas. Y en esas estaba Alberto en compañía de Antonio Bartrina -cantante del grupo Malevaje- un viernes de agosto de 1981 que acabó en pelea.
El paquete de tabaco -Fortuna, para más señas y redondear la anécdota- que llevaba en el bolsillo consiguió parar el cuchillo y dejar todo en un susto con algo de sangre. Y un autorretrato herido.
Como ya es Navidad en Photolari, vamos a regalar un ejemplar del libro «50 fotografías con historia». Para participar, sólo tienes que contarnos en los comentarios cuál es tu foto histórica favorita, o hablarnos de alguna tuya que tenga una historia muy especial. La que más nos guste se lleva para casa este libro. (Tenéis hasta el viernes 15 para participar y el envío del libro es a España)
Muy interesante, gracias. El libro ha de ser muy interesante.
Por cierto. ‘ramal de Barcelona’ supongo que es el ‘raval’ + autocorrector ????
Una fotografía que le tengo especial admiración es la del fotógrafo Dennis Stock, fotografiando a James Dean en una barbería. Creo que la muerte tan joven del actor y la mirada que le supo poner este fotógrafo son geniales, ademas se le añade que me encanta el rollo americano, barber shop y todo ese estilo de la epoca.
Mi fotografía favorita es la de HENRI CARTIER-BRESSON titulada «Detrás de la estación San Lázaro» París, Francia, 1932.
Para mi una fotografía que desde que la vi jamás se me ha borrado es «The Terror os War» de Nick Ut. La cara de la niña desnuda y quemada y sobre todo la historia posterior, con el fotógrafo llevándola a un hospital en el que se negaban a atenderla, hasta que les dijo que lo pondría en la noticia junto a la foto, para mi es algo brutal.
«Niña afgana» de Steve McCurry. Pocos retratos han tenido ese impacto en la cultura popular.
Yo elijo la de Einsten sacando la lengua. Le quita esa aureola de genio que era, y sobretodo te recuerda que disfrutes y seas feliz con lo que hagas (aunque tengo entendido que sacó la lengua harto de los fotógrafos que le esperaban, pero oye, cada uno interpreta una fotografia como quiera 😛 )
Pues acabo de comprarme «Los Americanos» de Robert Frank traducido al castellano y «Vivian Maier, fotógrafa», en italiano. Me anoto este, que caerá seguro.
Personalmente me impresionó la fotografia de Robert Capa » Muerte de un miliciano», representaba la muerte de un miliciano en la guerra civil española alcanzado por un disparo.
Pues es una foto de alguien que no murió de aquella manera, sino que posó para Capa.
No se trata, por tanto, de ninguna acción bélica como tal. La foto está tomada en Espejo y no en Cerro Muriano, como durante años se creyó.
Prueba palmaria de que la historia que nos cuenta y nos maravilla es lo más importante en toda fotografía (al menos en la denominada «social»)… infinitamente más que la parte técnica de la misma, de nulo interés aquí.
No se si se puede calificar de histórica pero si es, para mi, una foto genial. Cuando hace ya años vi en un libro por primera vez «Niño destruyendo un piano» de Philip Jones Griffiths, no la consideré más que otras buenas fotos que aparecían en aquel libro. Sin embargo, cuando posteriormente empecé a leer sobre fotografía, de forma instintiva siempre aparecía en mi cabeza esta foto.
Por fin un día la busqué de nuevo y entonces comprendí que la foto tiene la estructura compositiva perfecta para contar una historia; una historia que llena, que perdura, que impresiona. Por eso hay tantas buenas fotos intrascendentes y fotos geniales que, aún para quien no sabe nada de fotografía, se quedan grabadas para siempre. Por eso hay maestros como Griffiths.
Como algunos citan a muy distintos fotógrafos, creo que conviene aclarar que las fotografías de este libro son exclusivamente de fotógrafos españoles.
Si tengo que quedarme con sólo una (decisión difícil) me quedaría con una de Eugene Smith: Tomoko en el baño. Es una fotografía que siempre me ha producido una sensación de ternura y abnegación por parte de la madre que aparece en esa imagen. Parece como si el tiempo se detuviera en esos momentos. La luz que entra por la ventana a contraluz, el blanco y negro en clave baja, la composición, siempre me ha llamado la atención en esta fotografía, que por otro lado tuvo repercusión internacional debido a la enfermedad de la niña provocada por los vertidos de mercurio en el pueblo pesquero de Minamata (Japón).
Reunido el comité de sabios (ejem) de Photolari y tras repasar vuestros comentarios e imágenes tanto aquí como en la web, por unanimidad se ha votado que la historia ganadora es la de Daniel Ibáñez Amol que comentaba en nuestra página de Facebook : «Fotos con historia, favoritas, de fotógrafos consagrados tengo muchas, así que decidirme por solo una… Pero a nivel personal, tengo una foto con historia, con mucha historia que me gusta mucho por lo que representa, y es la primera vez que mi hijo pudo, gracias a la tecnología, escuchar el mar. Espero que a vosotros también os guste y compartáis conmigo el significado de la foto. https://www.flickr.com/photos/capitanhaddock/28748325613/» Nos ponemos en contacto con él para gestionar el envío y muchas gracias a todos por participar…
No sé si llego tarde, pero da igual, Ernst haas en general y la foto de dos coches en movimiento y en la calzada se ve dos flechas.
Puestos a elegir me quedo con las Joana Biarnés y las de Joan Colom. El reportaje de Los Beatles solo lo pudo hacer ella con tenacidad y querer hacer diferente a lo de los demás, además de por ser mujer, porque si en vez de ella, en la puerta de la habitación aparece un señor con bigote, Ringo le hubiese mandado a freír espárragos. Reportaje que no fue publicado en Pueblo en principio, por las órdenes llegadas de la “autoridad” y que finalmente se publicó en la revista Ondas, gratis.
Y las de Joan Colom porque muestran aquella España gris y sórdida, de gomas y lavajes que cantaba Serrat en “Temps era temps”, en donde todos los barrios chinos se parecían.
El otro día estuve a un paso de comprarme este:
https://www.casadellibro.com/libro-joan-colom-yo-hago-la-calle-fotografias-1957-2010/9788415691761/2287147
También me tentó este:
https://www.casadellibro.com/libro-garry-winogrand/9788498445046/2507921
Pero al final me llevé uno de Vivian Maier. 🙂
Y entre Joam Colom y este de Catalá-Roca, ¿cuál prefieres?
https://www.casadellibro.com/libro-francesc-catala-roca-obras-maestras-2-ed/9788492481163/2199641
Joan, con n. Sorry.
Me quedo con la de Joana Biarnes porque estuve en una expo en Barcelona y dio la casualidad de que estaba alli y pudé conocerla y me parece aparte de una fotografa excepcional un persona muy cercana