Desde que se presentaron los nuevos iPhone 13 Internet se ha llenado de vídeos y artículos analizando a fondo todos los aspectos de esta nueva generación. Unos terminales que, por cierto, casi nadie ha podido probar aún, así que como suele ser habitual, la mayoría de los supuestos análisis son simples divagaciones sobre lo que se vio en la presentación.
Y nosotros no íbamos a ser menos. Por eso vamos a escribir unas líneas opinando sobre una de las novedades de los nuevos iPhone que más está dando que hablar: el llamado modo cine, o Cinematic Mode.
Enfoque selectivo
Llevamos años viendo como nuestros teléfonos son capaces de hacer fotos de retrato con el fondo desenfocado imitando lo que conseguiríamos con una cámara de sensor grande y un objetivo luminoso.
Ahora Apple ha trasladado esto al terreno del vídeo. Los nuevos iPhone pueden crear un mapa de profundidad a tiempo real durante la captura de vídeo, y usarlo para simular una profundidad de campo muy pequeña y esos fondos borrosos que mucha gente identifica con el look cinematográfico.
Además este mapa de profundidad queda registrado en cada secuencia, por lo que más adelante también será posible escoger el punto de foco a posteriori, e incluso hacer transiciones de foco en la escena en postproducción.
Y no solo eso, los iPhone 13 también vienen dispuestos a quitarle el trabajo a los foquistas, ya que son capaces de intuir mediante IA cual es el centro de atención de una escena y mover el punto de foco automáticamente.
Como suele ser habitual en todo lo que rodea a Apple, la novedad ha sido recibida por muchos como algo «revolucionario» y que «cambiará la manera de hacer cine». Incluso han contratado a la cineasta Kathryn Bigelow para darle más credibilidad a la propuesta, de la misma manera que hicieron durante el lanzamiento del iPhone 12 con el director de fotografía Emmanuel Lubezki.
Para demostrar todas estas funciones Apple ha publicado unos cuantos vídeos de muestra que efectivamente lucen espectaculares. Pero no hay que olvidar que lo de menos en estos vídeos es casi la cámara utilizada. Se trata de producciones de alto presupuesto con iluminación, grúas, actores, localizaciones espectaculares y vestuario y attrezzo de primer nivel.
Además, exactamente igual que ocurre con el modo retrato en fotografía, el desenfoque de este modo cinemático no es real, con lo habrá que esperar a ver que tal funciona en entornos menos controlados y en planos menos dinámicos de los que ha mostrado Apple, en los que no da tiempo a fijarse cómo de preciso es el recorte entre la zona enfocada y la que está fuera de foco.
Y mientras llegan pruebas un poco más rigurosas de este nuevo Cinematic Mode, no está de más recordar que no, que los fondos desenfocados no son cine. En Ciudadano Kane por ejemplo se uso iluminación muy potente para poder cerrar el diafragma y tener una profundidad de campo casi infinita. ¿Acaso la obra maestra de Orson Welles no tiene look cine?
Lo que si parece claro es que el enfoque selectivo va a convertir al iPhone 13 en una herramienta creativa muy potente y divertida, y que sin duda va a contribuir a que los vídeos grabados con el teléfono de Apple luzcan cada vez mejor. Eso sí, al usar este modo se mantiene la compatibilidad con HDR en Dolby Vision de los iPhone 12, pero la resolución máxima queda limitada a Full HD y 30 fps.
En las primeras pruebas publicadas por los usuarios es fácil detectar que el desenfoque no es real, no solo por el recorte, si no también porque la mayoría de la gente tiende a aplicar el efecto al máximo, cuando seguramente es más creíble si se usa con moderación. En todo caso los vídeos quedan muy vistosos y estamos deseando poder probarlo en persona.
Grabación en ProRes
Más interesante desde el punto de vista profesional -y que ha pasado mucho más desapercibido en los medios- es la posibilidad, por primera vez en un teléfono, de grabar en formato ProRes. Sin extendernos mucho en temas técnicos el ProRes es lo que se llama un códec intermedio, es decir especialmente concebido para la edición.
El ProRes contiene mucha más información que los típicos códec ultra comprimidos como el H.264 o el HEIF / HEVC, lo que hace que tenga menos problemas de artefactos y que sea más sólido a la hora de corregir el color o de aplicar efectos especiales.
Así, cuando esta función llegue a los iPhone 13 a finales de año, sin duda será mucho más fácil integrar planos rodados con estos teléfonos en un rodaje estándar.
Pero una vez más hay que tener varias cosas en cuenta antes de lanzar campanas al vuelo. El ProRes tiene varias versiones con diferentes flujos de datos, y aun no sabremos cual llegará al iPhone. Entre el ProRes Proxy con 38 Mb/s y el ProRes 4444 XQ con flujos de hasta 3539 Mb/s en 4K hay todo un abanico de opciones. Tampoco hay que descartar la posibilidad de una nueva versión aun más comprimida especialmente para estos teléfonos.
Otra cuestión es el almacenamiento. Si queremos usar el iPhone como cámara de vídeo usando un códec potente es posible que haga falta adquirir las versiones con más capacidad, y todos sabemos que Apple se cobra con creces cada giga de más.
El iPhone 13 Pro Max con un tera de almacenamiento cuesta 1.839 euros. No está de más recordar que por ese precio podemos comprar una Blackmagic Pocket Cinema Camera 6K.
¿Una revolución en el cine?
¿Podemos esperar de los nuevos iPhone una revolución en la manera de grabar vídeo? Nosotros francamente creemos que no. Pero si está claro los teléfonos móviles son cada vez más herramientas creativas muy versátiles, capaces de convivir con cámaras tradicionales y también de sustituirlas en muchísimas situaciones. Y sin duda tiene pinta de que el iPhone va a seguir siendo el rey de los smartphones en el terreno del vídeo.
Pero por favor, el cine es mucho más que la cámara con la que se graba. Dejemos ya de vender la ilusión de que un teléfono puedes rodar una película usando como gancho un vídeo en el que seguro que habrá costado mucho más la iluminación, la dirección de arte, los actores, el vestuario e incluso el catering de lo que cuesta un fantástico y potente iPhone 13.
La verdad todo lo referente al iphone me importa poco y nada, pero las técnicas cinematográficas de dirección de cámara me encantan, la genialidad del deep focus en el Ciudadano Kane que incluye varias técnicas y en los casos más extremos se debió al uso de la técnica de dioptrias divididas lo que se traduce en el uso de una lentilla sin marco que solo afectara una parte del fotograma, son tomas imposibles aun cerrando el diafragma al mínimo, usando angulares e incinerando el sets de luces. Esas tomas se las reconoce por que en existe 2 planos en foco con desenfoque entre los mismos.
https://tadleckman.wordpress.com/2017/05/03/cheating-depth-the-magic-of-split-diopter-shots/
Es un recurso que se sigue utilizando, y existen otras técnicas como el uso de lentes tilt, para jugar con la profundidad de campo como recurso narrativo, Alvaro, lo maravilloso del cine es que no todo es lo que parece.
Excelente valoración, algún que otro aficionado se quedará alucinado con esta joya de los smartphone, pero si es cierto que solo será el rey en vidios ante otros móviles de esta época. Saludos y gracias por esta info.
Me los imagino rodando el Making con Arri Alexa 😅