En los últimos tiempos se ha puesto muy de moda eso de utilizar objetivos antiguos y descatalogados en cámaras digitales actuales. Una tendencia que está muy relacionada con la aparición de las cámaras sin espejo que, gracias a su escasa distancia de brida (la distancia que hay entre la montura y el sensor) permiten montar ópticas de casi cualquier sistema mediante el uso de adaptadores.
Y es que, más allá de la experimentación y la curiosidad, la utilización de objetivos antiguos es también una manera muy asequible de poder contar con focales extremas y ópticas muy luminosas, que además en ocasiones proporcionan un look vintage muy interesante.
Lo que no es tan habitual es lo que ha hecho el fotógrafo y cineasta Mathieu Stern: montar un objetivo de fuelle de 140 años de antigüedad en una cámara de cine RED DRAGON de 15.000 dólares con resolución 5K. La óptica en cuestión (construida 10 años antes que la Torre Eiffel, tal y como señala es propio Stern), es un 135 mm con enfoque por fuelle.
¿Qué os parece el resultado del experimento?
Aparte de la curiosidad, esto se merece en andaluz un ¿pa qué?, que lo dice todo.
¿Y?