Un año más repasamos las cámaras que han utilizado los ganadores en esta edición de los premios World Press Photo. Más allá de la curiosidad, puede servir para hacer una radiografía rápida del estado del mercado en el ámbito del fotoperiodismo.
Extrapolar los datos a partir de las 45 fotos ganadoras no será ni muy justo ni muy preciso, pero puesto que estamos hablando de algunos de los mejores autores y de las fotos del año, el interés es más que evidente.
Estos son algunos de los datos más relevantes que hemos extraído:
· La Canon EOS 5D Mark III es la cámara más usada y, de hecho, la empleada por el máximo ganador de esta edición. El año pasado fue la EOS 1D X.
· El dominio de Canon es bastante abrumador. De los 38 trabajos premiados de los que hay datos, 23 fueron realizados con cámaras de esta firma. Nikon se conforma con 7 premios, un dato que no cuadra con esa imagen de reparto al 50% que tradicional se tiene del segmento del fotoperiodismo profesional.
· Las cámaras sin espejo siguen sin despegar en este terreno. Su presencia es casi anecdótica en comparación con las réflex. Eso sí, Olympus puede estar contenta porque los dos únicos modelos de este tipo son suyos: una E-M1 y una E-M5. Ni rastro de Sony y Fujfilm entre los premiados.
· El iPhone se cuela también entre los ganadores. Si hace poco hablábamos de su imparable crecimiento en Flickr y como cámara de diario para muchos aficionados y profesionales, parece que esa tendencia también tiene su reflejo aquí.
· Las cámaras de película lejos de desaparecer refuerzan su presencia: 1 modelo el año pasado, 2 en esta edición. Es, lógicamente, poco más que una anécdota pero la Mamiya 7 vuelve a repetir en los WPP 2015. Algo que muchos interpretarán como la prueba definitiva de lo que llevan tiempo reclamando: una versión digital de esta venerada cámara. Junto a ella, por cierto, una Hasselblad 500. Clasicismo en estado puro.
·Película sí, pero de formato medio. Y Leica también, pero de nuevo como poco más que una curiosidad: una M9 para un original reportaje sobre un campeonato de tenía desde un punto de vista diferente.
· Hablando de puntos de vista diferentes, la Ricoh GR empleada junto un dron para realizar fotografía aérea por Tomas van Houtryve es un ejemplo más de que, al final, el uso real de una cámara lo determina el fotógrafo, no los departamentos de marketing y los análisis de mercado. En cualquier caso, nos alegra ver por aquí a una de nuestras compactas favoritas.
· La EOS-1D X arrasa en la categoría de deportes, dejando a las Nikon D4 y D4s en una situación delicada. Pero no todo son modelos de gama alta y miles de euros, porque entre los trabajos premiados también se cuelan la citada E-M5 de Olympus y una sencilla Canon EOS 50D junto al zoom de serio 18-55 mm f3.5-5.6.
Contenido publicado originalmente en Quesabesde