Que el futuro de las compactas pasa por especializarse en el vloging hace ya tiempo que Sony lo ha dejado bastante claro. Ahora Canon se apunta también a esta tendencia con su nueva PowerShot V10, una cámara con sensor de 1 pulgada y pensada como modelo de entrada para quienes -según explica la marca- quieren algo más que un smartphone para sus vídeos.
Con un diseño muy peculiar, en realidad esta V10 parece recuperar conceptos como el de la curiosa Legria Mini X -una cámara que en 2014 ya jugaba con la idea del vloging- o más tarde la Powershot N.
Una cámara de bolsillo que pesa apenas 210 gramos y pensada directamente para grabar en vertical y con los formatos más habituales en redes sociales. Cuesta con un CMOS de 1 pulgada y 20 megapíxeles y una óptica fija equivalente a un 19 mm f2.8.
Dispone de un botón frontal de grabación, pantalla abatible de 2 pulgadas y es capaz de grabar en 4K 30p o Full HD a 60p, sin limitación de tiempo y con un filtro ND automático de hasta 3 pasos.
El audio es otro de los aspectos clave en esta cámara, que cuenta con dos micrófonos integrados e incluye de serie los clásicos dead cats para el viento. En uno de los kits propuestos también se vende junto a una sencilla jaula desarrollada, como los accesorios para micro, por Smallrig.
De todos modos, además de la rosca para trípode la cámara también incluye un soporte integrado que permite apoyarla para grabar o realizar un streaming. La conexión USB C además de cargar la batería (se promete una hora de autonomía, aproximadamente) también permite esta conexión directa para usarla como webcam.
Disponible a lo largo del próximo mes de junio, su precio será de unos 500 euros. Desde Canon se plantea como una alternativa sencilla y económica a sus PowerShot G7X Mark III o a la más reciente EOS R50.
Qué carallo es el «vloging» ???
Jajaja