Suena al clásico alarmismo de vendedores de antivirus o telediario de Antena 3 plagado de catástrofes y peligros, cierto. Pero investigadores de Japan’s National Institute of Informatics aseguran que es posible clonar la huella de una persona a partir de una foto en la que se vean sus manos y que esté tomada a una distancia de hasta 3 metros.
Una descripción que coincide perfectamente con todos esos selfies con los dedos en V haciendo el símbolo de la paz y que, por lo visto, son un potencial riesgo para todo aquello cuya seguridad dependa de nuestra huella dactilar, desde desbloquear el móvil hasta autorizar pagos.
Evidentemente, ni hace falta que sea un autorretrato, ni el signo en cuestión es obligatorio. Con que se vean las manos -incluso si eres el presidente de Estados Unidos posando en tu Instagram con el dedo bien a la vista- podría servir.
Aunque el estudio no da más detalles sobre la resolución de imagen necesaria para obtener esta información, sí asegura que una vez conseguido el robo de estos datos biométricos, existe un gran mercado en la llamada Dark Web.
Según explican en The Telegraph, no es la primera vez que este tipo de datos suponen un compromiso para la seguridad. En 2015 un hacker consiguió duplicar el iris de Ángela Merkel a partir de una fotografía, por citar un ejemplo conocido.
¿La solución? Compartir menos selfies o, como proponen estos investigadores, recurrir al sistema que casualmente ellos mismos están desarrollando. Se trata de una lámina transparente que, colocada sobre los dedos, impide que las huellas se puedan clonar a partir de una fotografía.
Un sistema que, eso sí, todavía tardará un par de años en salir al mercado. Mientras tanto, siempre queda la opción de esconder las manos en las fotos. O llevar guantes, claro.
O no hacer el signo de la victoria, que no entiendo que puede tener de victorioso hacer la señal con los dedos mientras se sacan una foto del careto en cualquier lugar. O directamente no hacerse selfies, porque seguramente a nadie en la tierra le importe un carajo ver el careto de cualquiera reproducido docenas de veces en cualquier escenario. Cosas de las redes sociales.
Es más que posible que a muchos de los que salen en los selfies, les parezca una buena noticia. Ya puestos querrán que los clonen enteros y así poder aparecer en todas partes, sin haber estado. Como aquellos que creo recordar, que se llevaban al peluche de alguien para hacerle fotos en distintos lugares. En fin cosa de las redes “tontíales”.
También nos podemos poner celo en los dedos, no hace falta que ningún lumbreras nos venda unas pegatinitas a precio de oro…
Ahora entiendo a Michael Jackson.
¿Clonar las huellas digitales a partir de una foto hecha a la distancia normal en éstos casos????.
No se puede escribir mayor majadería en menos espacio.
Me parece absurdo que partiendo de una fotografía a baja resolución (digamos 900×600) sean capaces de clonar una huella. Otra cosa es si la foto se publicara a alta resolución.