El robo de material fotográfico no es, desgraciadamente, nada nuevo. Pero sí una modalidad que, por lo visto, se ha puesto de moda durante los últimos meses: engañar a fotógrafos con falsas ofertas de trabajo para sustraerles su equipo.
Con diferentes variaciones, el sistema era tan sencillo como eficaz: un supuesto fotógrafo contrataba a otro para realizar un reportaje, pero desaparecía en algún momento de despiste cuando éste dejaba su material en el coche.
Según ha comunicado la Guardia Civil de la localidad valenciana de Puçol, un hombre de 37 años ha sido detenido en Getafe (Madrid) dentro de la denominada operación «bokeh», acusado de una decena de hurtos a fotógrafos utilizando este truco.
Tal y como recoge la agencia Europa Press, el material robado en diferentes puntos del país era rápidamente puesto a la venta. Además, el supuesto autor utilizaba matrículas falsas y líneas de teléfono dadas de alta con otra identidad para no poder ser localizado una vez que había contactado con las víctimas.
Se desconoce si el material robado ha podido ser localizado o recuperado pero, en cualquier caso, mejor tomar buena nota: no hay que dejar la cámara o cualquier otro material en el coche. Ni en el propio -al menos no a la vista- ni mucho menos en el de un desconocido.
Si hubiese castigos ejemplarizantes se acabarian las tonterias.
Postúlate como Fiscal General de Estado y actúas de oficio contra estos crímenes de lesa humanité
Lamentablemente, en este caso, el «objetivo» era el fotógrafo. Estoy de acuerdo con Amigo, a los rateros, les sale muy barato cometer estos robos.
lamentablemente. Estos y cualesquiera otros por desgracia. En este pais delinquir sale barato.
Que casualidad, que en los países donde los castigos, al crímen, son más duros es donde más criminales hay.
¿Cuándo vamos a quitarnos de la cabeza la idea de que la ley de Talion es la solución?