Coincidiendo con el Día de los Derechos Humanos el pasado 10 de diciembre los organizadores del Premio Luis Valtueña -dedicado a fotografía humanitaria- anunciaron el ganador y los finalistas de su 25º edición.



El ganador de la edición 2021 ha sido el fotógrafo polaco Edrzej Nowicki con su serie The Scars (las cicatrices), que trata sobre las heridas físicas y psicológicas ocasionadas durante las protestas que se produjeron en Bielorrusia en 2020 contra el presidente Lukashenko y que sufrieron opositores al régimen, familiares de personas torturadas y soldados involucrados en el conflicto.


Los finalistas han sido el italiano residente en Perú Alessandro Cinque con su serie sobre la minería en Perú y las graves consecuencias para los nativos y el medio ambiente.



El venezolano afincado en México Alejandro Cegarra con sus fotografías sobre Mexico y la militarización de la frontera con Guatemala.


Por su parte, el francés Jérémy Lempin con la tierna historia de un caballo de competición retirado y convertido en “terapeuta” para ayudar a personas gravemente enfermas.


Recordemos que estos premios, organizados por Médicos del Mundo, se celebran desde 1997 en memoria de Luis Valtueña, Flors Sirera, ,Manuel Madrazo y Mercedes Navarro, cooperantes de la organización que fueron asesinados en Ruanda mientras realizaban proyectos de acción humanitaria. El jurado eligió a al ganador y finalistas entre 808 candidaturas recibidas de 94 países.
Tanto machacar con las desgracias del tercer mundo que al final se conseguirá a través de la repetición continuada y pertinaz el efecto contrario al deseado: la insensibilización y la indiferencia hacia los infortunios del ajeno y el extraño.
Ya está bueno!
Tienes toda la razón, es mejor ignorarlo y así no te incomoda.
Mejor centrarnos en fotografiar lo que sea bello y cómodo y no incomodar las conciencias occidentales.
No seas falaz, no pongas en mi boca cosas que yo no he dicho, y sobre todo no seas demagogo. No digo que haya que ignorar la realidad, digo que la sobresaturación de un mismo contenido informativo, truculento y atroz, lleva a la pérdida de la sensibilidad, a la ignorancia y al adormecimiento de las conciencias.
Tu comprensión lectora está bajo mínimos.
Ah, pero que delicada la consciencia del señor
+100
Yo con este tipo de eventos tan «humanitarios» nunca sé si se trata de concursos de fotografía pura y dura o contenidos autopromocionales de esas ONG’s siempre tan menesterosas de recursos y fondos públicos para mantener su chiringuito.
Coincido
Buenas fotos
No iría yo tanto