Más de dos años después de sorprender a todo el mundo con el lanzamiento de la ONE R, Insta360 ha decidido renovar su peculiar cámara modular con el lanzamiento de la nueva ONE RS. En Photolari hemos podido probar una unidad de preproducción durante unos pocos días, y hemos hecho un vídeo para explicaros todos los detalles y enseñaros que tal se comporta.
Con un diseño totalmente continuista respecto a la generación anterior, la ONE RS viene con novedades en el módulo principal o núcleo y en el módulo de batería. Pero además viene acompañada de un nuevo módulo de cámara 4K totalmente distinto al que venía con la ONE R original.
El módulo de cámara de 360 grados y el de sensor de 1 pulgada -desarrollado con Leica- son los mismos que en la generación anterior. Todos los módulos, los antiguos y los nuevos, son perfectamente compatibles y combinables entre sí.
Así el nuevo núcleo de la ONE RS cuenta con un nuevo procesador que, según la firma, mejora el algoritmo de estabilización, la gestión del audio y la conexión WiFi para comunicar la cámara con un smartphone, que ahora es un 50 por ciento más rápida.
Además ahora es posible aplicar la estabilización FlowState directamente en la cámara y guardar las secuencias ya estabilizadas. Hasta ahora había que pasar por la app o por el programa para ordenador Insta360 Studio para estabilizar los vídeos. Eso sí, la estabilización en cámara no incluye los modos de bloque del horizonte a 45 y 360 grados.
La otra gran novedad tiene que ver con la autonomía, ya que el módulo de batería crece de 1190 mAh a 1445 mAh, promocionando un 21 por ciento más de capacidad. La cámara, por cierto, sigue siendo resistente al agua y puede sumergirse hasta 5 metros.
El mayor tamaño de la batería ha obligado a rediseñar también el soporte de montaje, que ahora cuenta con una abertura lateral muy práctica, una cubierta para reducir el impacto del viento en la cámara y un placa de disipación de calor.
El nuevo módulo de cámara 4K Boost, por su parte, viene armado con un sensor de 1/2 de pulgada y 48 megapíxeles, una configuración que recuerda bastante a lo que equipan algunos teléfonos móviles del mercado. El objetivo tiene una focal de 16 milímetros.
La cámara es capaz de grabar en 4K a 50 y 60 fps con flujos de 100 Mbps, y en 2,7K con velocidades de hasta 100 fps. También contamos con un modo panorámico en 6K con una proporción de aspecto de 2,35:1 y un tamaño de cuadro de 6016 x 2560 píxeles.
Otra novedad de la cámara el llamado modo HDR activo, que permite mejorar el rango dinámico de las secuencias.
La Insta360 ONE RS, junto al módulo 4K Boost y el módulo de 360, costará 570 euros, y 320 euros si nos quedamos únicamente con el módulo 4K Boost.
Este artículo es parte de un acuerdo entre Photolari e Insta360.
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