Aunque nunca llegaron a ser tan populares como las Polaroid, Kodak también jugó en su momento en la liga de las cámaras instantáneas con sus singulares EK y Kodamatic. Ahora la firma –o lo que queda de ella, repartida en diversas licencias que permiten fabricar y vender productos bajo su nombre- ha anunciado su primera instantánea digital.
Bautizada como Printomatic, en realidad se trata de una sencillísima compacta de 10 megapíxeles con una impresora integrada. Algo similar a las Polaroid Snap –también en lo que respecta a los coloridos acabados- pero esta vez con el logotipo de Kodak.
Disponible a finales de septiembre por uno 70 dólares, la cámara permite obtener copias en color y blanco y negro de 10×15 centímetros, así como guardar las imágenes en una tarjeta MicroSD.
La Printomatic de Kodak parece haberse aprendido bien el libro de estilo de la filosofía de las cámaras Lomo –a ellos les ha funcionado durante años- así que apuesta básicamente por el diseño y la nostalgia, dejando las prestaciones técnicas en un modestísimo segundo lugar. De hecho, poco más se puede decir de esta compacta, dotada de una óptica de focal fija, visor directo y desprovista de pantalla posterior.
Pudiendo y no.