Algunos ya han bautizado el invento como la reinvención de la cámara, convertida ahora en un servicio. Otros han preferido hilar menos fino y se limitan a describir Relonch como la penúltima ocurrencia absurda en busca de un público que quiera algo diferente y esté dispuesto a pagar por ello.
Una cosa está clara, estamos ante una de esas ideas que, al menos durante unos días, va a dar mucho que hablar. Porque Relonch en realidad no es una cámara, sino algo así como una funda que convierte –según leemos en Petapixel– una Samsung NX con un 30 mm f2 en un modelo en el que sólo hay dos botones: encendido y disparador.
Quien contrate este servicio por 99 dólares al mes recibirá esta cámara tuneada y reducida a su mínima expresión y en la que, por cierto, tampoco hay pantalla. Porque lo más divertido del asunto viene ahora: la idea es que el usuario no pueda ver sus propias fotos, sino que éstas sean directamente enviadas a través de la conexión 4G de la cámara a las oficinas de Relonch.
Allí un equipo de editores se ocupará de elegir las mejores y, sobre todo, retocarlas -aparentemente mucho- para devolvérselas a la mañana siguiente a su autor a través de la aplicación que tendrá instalada en su móvil.
La verdad es que suena complicado, por mucho que la idea de sus creadores sea simplificar al máximo el proceso fotográfico y tal vez retomar aquello que decía Kodak de «usted sólo apriete el botón, nosotros nos ocupamos del resto».
En este caso, eso sí, a cambio de unos 1200 dólares al año por una cámara con un sólo botón y un surtido de imágenes con una buena ración de HDR, contraste y viñeteado.
¿El futuro de la fotografía o un simple chiste? El debate está servido.
El mensaje que lanzan es terrible, pero ¿acaso no es el camino que ha tomado la fotografía con la «democratización» de la misma con las nuevas tecnologías?
Hola a mi no me convence nada… dejando de lado el tema de la privacidad y que por ahi la foto salió y ellos dicen que no salió (Qué putada no) y todos los peros que se te ocurran… Para pagar por este servicio prefiero pagarle a un fotografo… de hecho quita todo incentivo a la persona de sacar su propia foto aunque sea mala… No, a priori no me convence este servicio… Perdon por mi humilde opinión.
Pues como fotógrafo me parece un chiste, y como dice la compañera de arriba, un acoso a la privacidad.
Pero viviendo en un mundo de retoques, filtros, selfies, y fotos para ver lo genial de nuestras vidas, lo mismo hasta triunfa. Yo ya me creo cualquier cosa…
No creo que triunfe; es una cámara de postureo, y el postureo es instantaneo… 24 horas es demasiado tiempo para el postureo!
buenísima reflexión si señor.
Pagar 1.200 dólares al año por una camara con dos botones y que terceros seleccionen y retoquen tus fotos… Mátane camión. Pero seguro que a mucha gente le parecerá lo más. Cada vez estoy más convencida de que se nos está yendo de las manos esto de la tecnología… ;P
Totalmente de acuerdo. Me anoto la frase»matame camión» es buenisima ja ja ja.
jajajaja creii que era un chiste pero veo que no.
se las inventan todas para vender
bueno sin darle mas importancia yo continuare com mi metodo mucho mas tradicional
saludos a toda la comunidad fotera-photolariense
A mi tampoco me gusta pero pensándolo un poco, no es acaso el resultado de lo que quiere parte de la sociedad con tanta foto sin venir a cuento y solo para llenar la red de mas bits de nada?
La historia es esta: la tecnología nos hace consumir muchísimo más tiempo de lo que -presuntamente- nos iba a ahorrar facilitando nuestra vida. Queremos ganar tiempo al tiempo para permanecer «conectados», a perpetuidad si es posible. Al final pagaremos hasta para que nos limpien el culo mientras nosotros seguimos a lo nuestro con el aparato de marras (smartphone, tablet, portátil…), porque desconectarnos un momento de la red nos produce infinita ansiedad. Hoy día si no estás conectado sientes que estás muerto… cuando en realidad es todo lo contrario.
A principio al leer la noticia, da la sensación que se han adelantado trece días. Quien dijo que ya habíamos visto de todo, se vuelve a equivocar. Desde luego el negocio es redondo, te colocan una cámara “oculta” de las sobrantes de la retirada de Samsung, y además te soplan los 99 pavos “navideños” mensuales por darle al “potochó” o similar. Habrá quien se corte por la funda en lo que parece piel, quizás en papel pintado……
Esto es como los coches que conducen por ti… que gracia tiene?
No, no tiene nada que ver. Nunca te prohibirán retocar tus propias fotos, pero ten por seguro que en unos años te prohibirán conducir por ti mismo en la via pública para garantizar la seguridad.
Guan cuestion, como se cambia el avatar.
Hay gente pa to, pero yo, ni de coña.
Esto y un bote de soylent, ¿a que más podemos aspirar?
Hay que ser muy friki para comprarse esto .Un servicio incompatible a cualquier persona que le guste minimamente la fotografia.
Va dirigido a personas que no son aficionados a la fotografía, y ¿pagarán esas personas 1200$ al año? Lo dudo.
YO me espero a la próxima generación con fotógrafo incluido, que pereza…
[…] de años después, también en Photolari (pero aquí por lo menos se entiende […]
[…] Somos capaces de enviar cámaras a hacer fotos a Marte, tenemos relojes inteligentes, gafas de realidad virtual e incluso somos tan modernos que tapamos los botones de las cámaras para que nada perturbe nuestro arte. […]
[…] Somos capaces de enviar cámaras a hacer fotos a Marte, tenemos relojes inteligentes, gafas de realidad virtual e incluso somos tan modernos que tapamos los botones de las cámaras para que nada perturbe nuestro arte. […]
¿En serio? Estos son como los de Kodak (salvando salvajemente las diferencias) con el añadido de que se les ha extirpado el sentido común sin anestesia y en una fiesta de fumaos.
Y peor será el que contrate el servicio, aunque ya se sabe que en la viña hay de todo y para todos.
Joder que banda.
Cuando llevábamos a revelar y copiar un rollo al laboratorio, no era muy diferente…
No veíamos el resultado hasta que retirabamos el sobre, días después, con los resultados. Previa selección del laboratorista, que a veces era un pescado, y definía a su criterio que estaba bien y que mal…