Desde la versión 7.3 Lightroom cuenta con nuevos perfiles y un ‘Navegador de perfiles’. Es posible que te parezca algo nuevo, aunque la verdad es que esta opción de trabajar con perfiles ya estaba presente anteriormente, aunque con menos posibilidades y bastante más escondida, en ‘Calibración de cámara’ y al final de la barra de herramientas.
Pero ahora tenemos muchos perfiles para usar en nuestras fotos, algunos exclusivos para fotografías en formato RAW, aunque la mayoría sirven también para JPEG.Una herramienta que merece la pena conocer y utilizar en nuestro flujo de trabajo.
¿Por qué son tan importantes los perfiles?
Los perfiles modifican la apariencia de las fotografías sin tocar ningún ajuste de ninguna herramienta, cosa que sí ocurre con los ‘Ajustes preestablecidos’ o ‘Presets’). Por tanto, nos permiten aplicar un ajuste base -de apariencia como los ‘estilos’ que podemos seleccionar en el menú de la cámara (Retrato, Paisaje, Vivido, Neutral, etc.)- y después aplicar los ajustes que necesitemos, sin perder el efecto aplicado por el perfil.
Si disparamos en formato RAW tenemos que tener en cuenta que la apariencia de nuestras fotos, tal y como las vemos en la cámara, se modificará al cargarlas en Lightroom, Photoshop, Capture One, etc.
El único software que mantiene la misma apariencia es el de la propia marca de la cámara y no suelen ser muy buenos. No es que sea peor que lo que muestra la cámara, simplemente diferente. Y es aquí nos vienen muy bien estos perfiles, ya que podremos elegir uno de la sección ‘Adobe Raw’ o de ‘perfiles’ (si tenemos perfiles personalizados) para sustituir el estilo de la cámara.
¿Cómo encuentro los perfiles?
En la parte superior del panel ‘Básicos’ nos encontramos con la opción ‘Perfil’, que contiene un desplegable con la lista de perfiles favoritos. Si queremos ver la lista completa podemos escoger la opción ‘Examinar’, de la lista o pulsar sobre el botón de los 4 cuadraditos de su derecha. Esto nos mostrará la herramienta ‘Navegador de perfiles’.
En este navegador de perfiles podemos visualizar la lista de perfiles disponibles. Es posible escoger entre tres tipos de visualización: lista, grande o cuadrícula. Tenemos un desplegable en la parte superior derecha, debajo del botón ‘Cerrar’.
Los perfiles están agrupados según el tipo de perfil o apariencia, dependiendo de si trabajamos en RAW o JPEG.
Para fotografías en JPEG tenemos disponibles:
- Favoritos (los perfiles que tengamos marcados con la estrella de ‘favorito’)
- Básico (2)
- Y los creativos Artístico (8), Blanco y negro (17), Moderno (10) y Vintage (10)
Para fotografías en RAW tenemos disponibles:
- Favoritos
- Adobe Raw (7), Coincidencia de cámara (11) Perfiles (perfiles personalizados que hemos creado anteriormente con la Colorchecker Passport, de X-Rite por ejemplo) y Heredado (7).
- Y los creativos (Artístico (8), Blanco y negro (17), Moderno (10) y Vintage (10).
¿Cómo se aplican los perfiles?
Al pasar el ratón por encima de un perfil, Lightroom nos mostrará la apariencia del perfil en la fotografía actual, la que estemos visualizando actualmente en el visor central de Lightroom. El perfil se aplicará en el momento en el que pulsemos sobre el perfil, con el botón izquierdo del ratón.
¿Cómo aplicar el perfil a varias fotografías?
Una vez aplicamos un perfil ya tenemos aplicada esa apariencia a la fotografía actual. Si tenemos varias fotografías seleccionadas y tenemos activado el botón de sincronización automática, al aplicar el perfil a la fotografía actual también se aplicará automáticamente al resto de fotografías previamente seleccionadas.
Otro método para aplicar el perfil a varias fotografías es aplicarlo a una, seleccionar las otras fotografías, sin dejar de seleccionar la fotografía que tiene el perfil aplicado, y pulsar sobre el botón ‘Sincronizar’ (marcando la opción ‘Tratamiento y perfil’ en la ventana ‘Ajustes de sincronización).
La magia de los perfiles
¿Pero por qué es tan interesante trabajar con esta herramienta? Hay un par de características que hacen que sea muy práctico trabajar con perfiles.
Al aplicar los perfiles no se modifican los ajustes de las herramientas de Lightroom. Se aplican de forma interna, por lo que no nos crean un ajuste previo en ninguna herramienta.
Si por ejemplo quiero modificar una curva para que los negros no sean tan densos, la curva estará a ‘0’, sin ningún ajuste. Esto hace que se diferencien claramente de los ‘Ajustes preestablecidos’ o ‘Presets’ que aportan una apariencia a costa de modificar las herramientas del programa, con lo que nos puede limitar las opciones de edición posterior.
Además, la apariencia de los perfiles creativos (Artístico, Blanco y negro, Moderno y Vintage) permite editar la cantidad de efecto. Al aplicar un perfil creativo nos aparecerá un deslizador en la parte superior de la herramienta ‘Navegador de perfiles’.
Este deslizador empieza en un valor 100 y podemos desplazarlo desde ‘0’ hasta ‘200’, con lo que podemos hacer que la apariencia del perfil sea muy sutil o mucho más fuerte.
Al realizar edición no destructiva, Lightroom nos permite aplicar o modificar el perfil en cualquier momento de la edición de nuestras fotografías.
Una herramienta interesante
Desde que a Lightroom le han empezado a aparecer competidores cada vez más fuertes, parece que en Adobe se están tomando en serio empezar a trabajar a fondo los problemas del programa y realizarle un lavado de cara.
Y en esa listada cosas a mejorar figura el trabajo del color de forma profesional, como ya se ofrece en Capture One, por ejemplo.
Ahora con la implementación de los nuevos perfiles y la colocación estratégica de estos para mostrar su importancia, empezamos a jugar en otra liga.
Buenos días, pues la gracia de la nueva actualización me deja el PC congelado, cuando salgo del programa y me pongo a hacer otra cosa. Vuelvo a LIGHTROOM y toma el ordenador congelado, por lo tanto he tenido que volver a la penúltima actualización. No se si le pasara a mas gente, un saludo.
A mi me pasa desde hace poco con los filtros Nik Colection, en concreto desde que Google dejo de ser propietaria de los filtros, quizás sea casualidad, no se.