Aunque las compactas de sensor pequeño pierden cuota de mercado año tras año, hay un segmento en el que aun siguen teniendo algo de tirón: el de las cámaras resistentes y todoterreno. Tal es el caso de la saga WG de Ricoh, que acaba de dar la bienvenida a la nueva WG-7.
Como no podía ser de otra manera, el principal atractivo de esta Ricoh WG-7 es su resistencia. La cámara presume de poder sumergirse hasta 20 metros sin carcasa, de sobrevivir a caídas de 2,1 metros y de soportar pesos de hasta 100 kilos. Además puede funcionar sin problemas a temperatura de -10 grados centígrados.
También cuenta con el habitual anillo de luces LED alrededor del objetivo, toda una seña de identidad de esta saga y que es especialmente útil a la hora de hacer tomas macro debajo del agua. Ricoh asegura que la luz en esta WG-7 es 10 veces más potente que la del modelo anterior, la WG-70.
El resto de especificaciones son bastante modestas: un sensor de 20 MP y 1/2,3 de pulgada, un zoom 24-140 mm, vídeo en 4K a 30p y pantalla LCD de 3 pulgadas. Además la cámara tiene función de Webcam.
Por el momento parece que la Ricoh WG-7 solo está disponible en Japón por 49.800 yenes, unos 380 euros al cambio, aunque es muy probable que llegue a los mercados internacionales más adelante.