Hace unos años descubrimos cómo era el trabajo de los fotógrafos en la Madrid Fashion Week. Esta vez hemos ido hasta Milán para, de la mano de Jorge Rastrojo, adentrarnos en una forma diferente de trabajar en uno de los grandes evento mundiales de la moda.
Y es que Rastrojo ha estado en la Milan Fashion Week practicando lo que se conoce como streetstyle: buscar lo más interesante que ocurre alrededor de esta cita, pero fuera de la pasarela. Algo que se traduce en la llegada de los famosos al evento y, sobre todo, los looks más vistosos que lucen quienes tampoco faltan a este tipo de citas.

Fotógrafo de moda y publicidad, era la primera vez que este joven extremeño afincado en Bilbao desde hace seis años se animaba a cubrir este evento en Milán. Y ya planea ir a la semana de la moda de París, aunque allí todo es un poco más complicado, nos cuenta.


«Lo primero es buscar los horarios y localizaciones de los desfiles y elegir los que más te interesan. En Milán la semana antes del evento es fácil encontrarlo, pero por lo visto en París es bastante secreto hasta el mismo día del desfile».
Aunque este tipo de cobertura aporta una gran libertad en cuanto a creatividad y planificación -lógicamente, no hace falta estar acreditado por ningún medio- también tiene ciertos problemas a la hora de vender o rentabilizar el trabajo.


Aunque había hablado con algún medio y revistas especializadas, nos cuenta Rastrojo, la respuesta fue que les era más rentable comprar las fotos directamente de las agencias que cubren las pasarelas.
La óptica más polivalente
Pero volviendo al método de trabajo sobre el terreno, lo primero es decidir los desfiles más interesantes y que más público y famosos congregarán. «Yo estoy haciendo entre 2 y 3 por día. Hay mucha distancia entre ellos y son una guerra que cansa mucho si quieres obtener las mejores fotos».

«Lo normal es ir entre 45 y 30 minutos antes de cada desfile para fotografiar la entrada de los invitados. y durante este rato puedes también disparar alguna foto a la gente que lleve looks que te gustan o extravagantes», explica.

¿Problemas? La cantidad de gente alrededor, las personas de seguridad que te impiden moverte, y los invitados que deciden entrar con el coche hasta el interior del recinto, enumera.
Según nos cuenta, para este trabajo ha usado una Nikon Z6 y una Nikon Zfc. Como ópticas. el 24-70 mm f2.8 de Nikon, un Tamron 70-210 mm f4 y el Nikkor 50 mm f1.8 Z, el único que tiene nativo para las Z por ahora, comenta.
«Lo que mas he usado ha sido la Nikon Z6 con el Tamron 70-210 mm. Creo que es el más polivalente, porque hay veces que tienes que tirar desde más lejos o por detrás de mucha gente y necesitas ese zoom. Y en el caso de que tengas el sujeto más cerca, con el 70 mm da para medio cuerpo, o puedes dar unos pasitos para atrás para coger cuerpo entero».


La parte técnica es importante, pero en este caso es básico saber quién merece o no una foto. Es decir, algo de ojo con los looks, y también cierto conocimiento del sector y de las caras conocidas que lo frecuentan.
«Hay que estar informado del mundillo y llegar con los deberes hechos, pero también puedes esperar a que la gente grite y entonces es fácil saber que esa persona es de las top», bromea.