Por Vicent Tena. ¿Por qué este proyecto? Quería buscar una alternativa a ese hábito de la fotografía instantánea, de consumo rápido, que no permite disfrutar de la imagen, procesar el significado ni crear un diálogo que haga al espectador activo.

Usar película en una cámara de formato medio de 22 años ya determina un procedimiento diferente. La toma debe ser reposada, pensada y probablemente incómoda en un espacio de diversión, dinamismo y masificación. Pero éste es el reto.

Ser fotógrafo significa tomar decisiones y ser consecuente con ellas. Abordar de forma original un festival de música veraniego, oferta presente en la mayoría de poblaciones de la costa, debía de ser la clave.
Todos los asistentes recogen material en imágenes y vídeos. Los profesionales realizan impactantes imágenes de escenarios y del supuesto ambiente de diversión que existe en los festivales, porque eso es lo que piden los medios. Pero pocos documentan la realidad.


El Festival Internacional de Benicàssim, el FIB, cumple 25 años. Es por tanto un festival consolidado, una referencia internacional en la música y en el descubrimiento de nuevos grupos, que atrae un gran público anglosajón, reuniendo a más de 170.000 asistentes en la edición anterior.
Pero el FIB no termina en los escenarios. La vida del fibero también se nutre del camping -el mayor reclamo en este festival- y la playa, cercana a las instalaciones. De ahí surge la aventura de secuenciar fotografías durante 24 horas, cada 15 minutos, sin paradas, sin dormir, sin tregua.


Un reto físico, y sobre todo un reto de concentración y creatividad. Probablemente la propuesta me vino derivada de uno de mis grandes referentes, Stephen Shore, con su obra “24 Hours” de 1969. En su afán de generar procesos creativos disparó cada media hora durante un día usando como modelo su amigo Michael Marsh en la banalidad del pueblo Amarillo (Texas).



Inicié el proyecto a las 12 del mediodía del viernes, finalizando a la misma hora del sábado. Benicassim es una población conocida por su playa, pero con una geografía que la caracteriza: el Parque Natural del Desert de les Palmes, cordillera de 700 metros de altura que protege del interior y probablemente contribuya a moderar temperaturas extremas.
En los pies de este accidente geográfico se encuentra las instalaciones del FIB. Por eso partí de este espacio -para acercarme en perspectiva a la vida del festival y de los llamados “fiberos”, verdaderos protagonistas del proyecto- terminando en la cota cero del mar al día siguiente.



Es un proyecto sobre personas, sobre la importancia de la música, la cultura del ocio en grupo y sobre la búsqueda de la identidad. A cada fotografiado le solicitaba su usuario de Instagram para remitirle la foto una vez revelada y escaneada.
A pesar de estar hablando con una persona que iba con un estilo muy definido de moda urbana, transgresor o al menos peculiar, es curioso ver que su cuenta de Instagram no reflejaba esa postura en absoluto. Es como usar el festival para adoptar un rol que no asume en el entorno habitual.


La experiencia ha sido dura y satisfactoria a partes iguales. Me ha permitido buscar y descubrir estrategias para ser más creativo y metódico. Ánimo a todos los fotógrafos a qué se pongan límites, para salir de la zona de confort y redescubrirse.

Citando de nuevo a Stephen Shore, autor referente de la fotografía en color, en 1990 se propuso disparar durante los siguientes 10 años únicamente en blanco y negro. Y lo hizo, claro.
Vicent Tena es licenciado en psicología y fotógrafo. Sus trabajos versan sobre contenido social, considerando la fotografía como medio para el cambio de actitudes y concienciación social. Actualmente aborda proyecto a largo plazo sobre ludopatía de apuestas deportivas en adolescentes y jóvenes. Descubre más trabajo de Vicent Tena en su web.
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Gracias al equipo de Photolari por dar visibilidad al proyecto y difundir nuevas formas de afrontar la fotografía.
Podéis seguir el proyecto en la web o en la cuenta de instagram @vicentt.
Abrazo
con que carretes has trabajado?
Gracias y felicidades por el proyecto
Un gran trabajo!!!!
Me han encantado Vicent, tienen un aura muy especial y has captado muy bien ese ambiente festivalero/playero!
Enhorabuena!
Hola Isra.
Los carretes son Kodak Portra 400. Creo que le van muy bien al proyecto.
Gracias
Gracias Bricks. Se capta perfectamente, la gente está muy dispuesta y sobre todo disfruté. Abrazo.
Cecilia, agradezco tus palabras. Puedes seguirme en la web con más imágenes y en mi cuenta de instagram, donde publico periódicamente historias a modo de juegos acertando la hora en que se tomó la fotografía
@vicentt
https://www.instagram.com/vicentt/
Me gusta mucho el tono/color en general de las imágenes, les aporta cierto aire de una época pasada.
Personalmente creo que quedan muy bien. Un trabajo excelente!!!!
Con tu permiso… te sigo en Instagram.
Saludos.
PD. A ver lo que tarda algún «rebientapost» en decir que esas imágenes las hace el/ella con su aifone y con mas calidad.
Estas fotografias las hago con una 80D y con mas calidad.
Pues ve y hazlas
Sin pretender entrar en polémica, siempre se ha dicho que lo importante son las fotos, con qué se hagan, es secundario. No por usar un determinado soporte, cuentan una historia diferente. Puede que se le pueda dar más mérito a la captura, pero eso no implica más relevancia. Un saludo.
Las haría si me saliera de la p….
… pantalla de la camara?
Gracias Santiago por tus líneas. Me alegra que te haya gustado. He ampliado la serie en mi web.
https://vicenttena.com/
Abrazo
Hola Tólix.
Más que la cámara, el proyecto se define por un procedimiento peculiar: Un disparo sin retorno, sin poder rectificar y sin poder disparar de nuevo hasta pasado un tiempo. Este es un gran reto que determina cómo afrontas cada captura.
Estoy de acuerdo contigo en que, cómo dice Momeñe, “hagamos buenas fotos, y luego hablamos”.
Gracias por alimentar el foro.