Lo de jugar con un teleobjetivo y las distancias para capturar lunas de proporciones gigantescas no es nada nuevo, pero el fotógrafo Daniel López ha conseguido llevar esta técnica a un nivel superior.
Para ello ha acoplado un telescopio y varios teleconvertidores de Canon a una cámara Sony A6300 y ha grabado la luna escondiéndose tras la cima del Teide, en las Islas Canarias, desde unos 16 kilómetros de distancia.
La compresión de las perspectivas provocan que el satélite terrestre aparezca con unas dimensiones titánicas, una sensación que aun se potencia más al haber varias figuras humanas en el plano.
El rápido movimiento de la luna, por cierto, se debe principalmente a la rotación terrestre, explican desde la NASA que hace unos días escogía este especular trabajo como su foto del día en la página APOD (Astronomy Picture of the Day).
Daniel López ha trabajado en Instituto de Astrofísica de Canarias y lleva varios años fotografiando el cielo de las islas, consideradas como uno de los mejores puntos de Europa para la observación astronómica. Es también el impulsor del proyecto El Cielo de Canarias.
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