A pocas horas de que se anuncien los ganadores de los World Press Photo, la organización del certamen se ha pronunciado al fin sobre las acusaciones de plagio contra Maximilian Mann, nominado en la categoría de medioambiente por su reportaje Fading Flamingos.
Los sospechosos parecidos de este trabajo con el reportaje de la fotógrafa iraní hicieron saltar las alarmas Solmaz Daryani y desencadenaron una de esas polémicas que nunca falta en cada edición de estos prestigiosos premios de fotoperiodismo.

Tras la acusación inicial, Mann se defendió mostrando una edición más amplia de su trabajo y donde las aparentes coincidencias quedaban más diluidas. En el último capítulo de este culebrón, incluso se llegó a acusar a la reportera de haber creado una nueva edición de su trabajo para intentar forzar los parecidos entre ambos trabajos.
World Press Photo anunció hace más de un mes que se daba por enterada del asunto, pero no se ha vuelto a pronunciar hasta ahora. Y lo hace para declarar a Mann inocente de plagio y, por tanto, mantenerlo entre los finalistas de esta edición.
«La conclusión es que el reportaje de Mann no contraviene el código ético de World Press Photo», apuntan en un larguísimo comunicado donde detallan las reuniones mantenidas por el jurado y el comité de expertos.
Aunque asumen que su decisión no gustará a todo el mundo y que un tema sobre derechos de autor, apropiación, plagio y copyright como este es sumamente complejo recuerdan que «según la ley ni la idea para una historia ni el estilo visual pueden ser registrados ni considerados propiedad individual».
Como era de esperarse, no hay forma de comprobar un plagio de este tipo, aunque tampoco es para premiar lugares comunes por los que han transitado otros fotógrafos, se supone que los premios son para resaltar la excelencia y lo novedoso, cuestiones que casi nunca parecen entrar en la cabeza de los jurados. Así el estado de las cosas
No es descartable que el comité de expertos que se reunió con el jurado, sea el mismo con el que se reúne el gobierno español para la toma de decisiones sobre el coronavirus.
Creo que este comentario está fuera de lugar y contexto. Pero allá cada cual con sus neuras.
Jajajaja, muy bueno.
algunas de las fotos son clavadas, no sólo en los lugares, composición y altura de la cámara. en alguna hasta se repiten los mismos elementos… No dudo que Mann hiciera más fotos diferentes, sólo faltaba, pero lo curioso es que haya elegido las mismas que Daryani y todavía se acuse a la fotógrafa irani de forzar el parecido, siendo anteriores. Tal vez la que debería estar nominada es ella, y no él, porque es más que evidente que las de Mann están algo más que «inspiradas» en su predecesora.
Yo si fuese Maximilian Mann, no estaría nada cómodo con ese premio, sus fotos van mas allá de la inspiración.
Las fotos son identicas. Yo aun diria más, son identicas! (Dupond y Dupond)
Y dando por seguro que WPP tiene muchissimas más fotos a escoger para premiar, desestimaria las discutibles y escogeria otras libres de toda duda. (A mi entender, quitaria las ganas a futuros plagiadores)
Dicho esto, solo hay una verdad indiscutible: WPP crea unos premios y premia a quien quiere, punto y pelota.
A nosotros(el publico) nos toca disfrutar de las imagenes y decidir si ignoramos si son plagiadas u originales.
Por mi parte, no voy ayudar a WPP comprando sus libros o visitando en dias de pago la exposición de estas fotos que anualmente se hacen en Barcelona. Pues si bien las fotos y sus historias me parecen de nivel año tras año, el no ser tajantes 100% con fotografias de dudoso origen, reservo mis pocos euros para otros proyectos culturales que creo son realmente originales.
Un saludo.
El WPP cada año peor, es un plagio de libro, a las fotografías retocadas que distorsionan la realidad de la información, se suma esto.