Si la madurez de un sistema se mide por la renovación de sus ópticas, podemos decir que Sony ya ha llegado a la mayoría de la edad. Y es que el 70-200 mm f2.8 GM -pieza clave de cualquier sistema profesional- acaba de dar el relevo a una nueva generación que promete mejoras en todas las áreas: peso, velocidad y calidad de imagen.
En todas no porque, claro, el precio ha subido. La buena noticia es que no demasiado: si el modelo original presentado en 2016 se puede encontrar ahora por 2700 euros, el nuevo llega con un precio oficial de lanzamiento de 3000 euros.
Durante unos pocos días hemos podido probarlo junto a la Sony A1 para comprobar si además de ser notablemente más ligero que su predecesor también ha mejorado la calidad de imagen, tal y como promete Sony.
Mucho más ligero
Según los datos oficiales, el nuevo 70-200 milímetros es casi un 30% más ligero. Eso se traduce en más de 400 gramos de reducción de peso.

Más allá de los números, la verdad es que entre las manos sorprende el cambio, sobre todo cuando se tienen la posibilidad de tener los dos objetivos juntos.
El tamaño es el mismo porque, salvo trucos como el sistema de plegado de Canon, poco se puede hacer al respecto, pero la verdad es que esta drástica reducción en el peso del equipo es una gran noticia para quienes estén acostumbrados a estar todo el día cargando con este zoom junto al 24-70 mm f2.8 y alguna óptica más.

Enfocando
En nuestro caso, hemos podido probar el nuevo 70-200 mm f2.8 GM II junto a la Sony A1, el modelo más potente y rápido de la compañía.
Es verdad que no teníamos muchas quejas respecto al 70-200 original. En su momento estrenamos la A1 con este zoom y a la hora de probar el enfoque y su ráfaga de hasta 30 fotógrafas por segundo no tuvimos la sensación de que el objetivo no fuera capaz de seguir el ritmo de la cámara.
Pese a ello, Sony habla de una velocidad de enfoque hasta cuatro veces superior en el nuevo modelo cuando se trabaja con modo de seguimiento.
No hemos tenido oportunidad de comprobarlo en escenas suficientemente exigentes como para notar esa diferencia, pero le daremos un voto de confianza a la compañía.
Si a alguien le sirve, el 70-200 original enfocaba muy bien, en este caso la sensación es que, sencillamente, no hay que preocuparse por el enfoque. Algo en lo que, claro, la A1 también tiene mucha responsabilidad.
Calidad mejorada
Más sencillo ha sido comprobar otro de los argumentos esgrimidos por la compañía para plantear esta renovación: un diseño óptico totalmente nuevo que promete un salto considerable en el rendimiento de la óptica. Veamos.


Disparando a f2.8 tanto en la los dos extremos focales, un rápido vistazo a las comparaciones entre el modelo original y esta segunda versión deja claro que el discurso de Sony no es un farol: hay una evidente mejora en la calidad de imagen resultante.
Algo que se repite, tal y como hemos podido comprobar, también a 100 y 135 milímetros. Y tanto si estamos hablando de un planto muy general con el detalle fino a mucha distancia como fotografiando una escena mucho más cercana.
Como ocurre tantas veces, no basta con ver los resultados de un equipo de forma independiente, sino que es al compararlo con la generación anterior cuando se percibe la calidad que ofrece.
Y es que, efectivamente, Sony ha hecho un gran trabajo con esta puesta al día de uno de sus clásicos que, queda claro, eleva el listón de la gama GM, la mejor de su catálogo de ópticas.
Acostumbrados a notas de prensa donde cuesta distinguir el marketing de los cambios reales, en este caso nos ha sorprendido gratamente cómo se ha cumplido al pie de la letra el guión prometido.
Y es que Sony ha conseguido un 70-200 mm f2.8 mucho más ligero, mejor construido y con una calidad de imagen muy mejorada. Y, por rematar la lista de buenas noticias, además esta vez se ha moderado un poco con el precio.
Es verdad que es más caro que el Canon equivalente (2700-2800 euros), pero sólo -ponga aquí todas las comillas necesarias- cuesta 300 euros más que el modelo anterior.
Cada día más contento con haber migrado a RF. A los que nos flipa el 70-200 f2.8 un factor decisivo es el tamaño y el peso el RF no tiene rival.
En cuanto a tamaño en modo transporte es cierto, en cuanto a peso el GM II de sony si esta a la altura, lo de las sin espejo FF al final si nos están aliviando la vida en cuanto a peso y volumen.
Ese 70-200 RF es una pasada sin duda.
Soy de Canon, me encanta las RF pero lo que me tira para atrás y mucho es la nula e inexistente variedad de lentes de terceros. El 70-200 mm me da a mi que es como una aspiradora cuando se juegue con el zoom y claro, tirando frente al mar con la brisa marina dándome de cara como que no me hace ni p**a gracia esa capacidad de absorción de humedad.
Cuando pase a sin espejo, posiblemente que no sea a Canon.
Nunca se me habría ocurrido pensar en el efecto aspiradora de un zoom.
Me gusta todo menos el precio, la verdad prefiero el tamaño a los objetivos que hay que desplegarlos, y encima son menos fragiles, pero bueno, capaz compre el diaf 4 en algún momento, que tiene un valor para el común de los mortales.
Ahí tiene la diferencia respecto a una montura FF que saco su primera cámara en el 2013 y los que aterrizaron hace un par de años, Sony ya anda por la segunda generación de más de un fijo o zoom.
Una comparativa con 70-200 sigma ¿ Le ganaría solo en velocidad de enfoque?
Ahí les dejo tarea
Hola, escribo desde Patagonia, Argentina ! Las nuevas tecnologías me dejan perplejo ! Ahora, ya jubilado, me salen con tantos adelantos ! Toda una vida con rollo, el paso al digital fue algo traumático……y ahora estoy viendo sistemas impensables hace unos años. Mi magra jubilación, traducida a Euros unos 120 ! Alcanzan solo para mirar ! Me consuela saber que la mejor cámara es siempre la que uno posee, si la conoce bien ! Un buen estofado no depende de la olla ni el gas !!!